Una mentalidad fuerte puede contribuir significativamente al aumento de tu confianza para hablar en público.
Aprender a ajustar tu forma de pensar es una habilidad clave para sentirte tranquilo cuando seas el centro de atención y tengas que expresar tus pensamientos, sentimientos e ideas ante grupos de personas.
En esta página, iré publicando todo lo relacionado que pueda ser útil sobre el tema de la mentalidad para hablar en público.

HABLAR EN PÚBLICO Y MENTALIDAD
Cuatro cosas simples para ajustar tu forma de pensar.
Empezamos esta nueva sección con los pensamientos de Shil Shanghavi, especialista en oratoria y presentaciones.
Según este autor:
La solo idea de hablar frente una audiencia nos deja en un estado de pánico desgarrador, llenándonos de nervios y miedo al fracaso.
Sin embargo, podemos superar los sentimientos de pavor porque tenemos la capacidad de controlar nuestros pensamientos.
Para ello, tenemos que ajustar nuestra forma de pensar.
En consecuencia, nos sentiremos más cómodos frente a una audiencia.
Una vez que aprendas a enmarcar tu razonamiento, la perspectiva de hablar en público parece menos aterradora.
Estas son las cuatro cosas que Shil aprendió para ajustar su forma de pensar cuando tenía que hablar en público:
1. Acepta que eres tu peor enemigo
Somos nuestro peor enemigo porque somos más críticos con nosotros que con nadie más.
Somos críticos con nosotros porque deseamos desempeñarnos bien y entregar lo mejor de nuestras capacidades.
Lo que nos hace temer al fracaso y tener un efecto adverso sobre nuestra confianza, es que queremos estar a la altura de las expectativas de los demás.
Si aprendemos a aceptar que poseemos las capacidades que se esperan de nosotros en lugar de nosotros, entonces nos desempeñaremos bien.
2. Visualízate con éxito
Shil Shanghavi nos indica un segundo factor clave para ajustar nuestra mentalidad y sentirnos más cómodos frente a una audiencia que aprendió de un entrenador deportivo.
Al parecer a los atletas de alto rendimiento se les pide que imagen el éxito antes de salir al campo como entrenamiento de su mentalidad.
Aunque, en un principio, Shil era reacio a creer en el concepto en el que se basa esta técnica («Todo lo que la mente del hombre pueda concebir y creer, puede lograrlo» – Napolean Hill) aún así la probó con éxito cuando tuvo que realizar su charla TED.
Por eso, ahora, nos recomienda encarecidamente que, la próxima vez que nos sintamos nerviosos, visualicemos de antemano nuestro éxito.
Para ello, imaginémonos frente a nuestra audiencia, pronunciando nuestro discurso tranquilamente y recibiendo un aplauso triunfal.
3. Medita
Cuenta Shil que ojalá hubiera empezado a meditar antes.
Una vez se decidió a hacerlo, empezó a notar la diferencia muy rápido.
Dice que 15 minutos de meditación al día le ha aliviado sus preocupaciones y mejorado su conciencia y sus sentidos.
Aprender a relajarse y controlar su mente le dio el poder de controlar su forma de pensar de manera positiva.
Relajar la mente a través de la meditación te será de gran ayuda si tienes un compromiso para hablar en público próximamente y te sientes nervioso.
Si no conoces a ningún maestro de meditación, siempre puedes usar alguna aplicación que cubra esta función para introducirte en el tema.
4. Construye tu “bóveda de confianza”
Una buena forma de fortalecer tu mentalidad, según Shill, es crear una “bóveda de confianza”, es decir, una memoria de esos momentos positivos en los que has hablado bien.
Ya sea en una reunión de equipo, o por haber respondido una pregunta, o haber ofrecido un brindis en el cumpleaños de un amigo, estáte atento a estos momentos y guárdalos en tu “bóveda de confianza”, a la que podrás acceder cuando tengas que hablar en público y te sientas nervioso.